Muchos de vosotros ya sabréis qué es Omnipod. Pero para quien no lo sepa, os sitúo. Omnipod (enlace externo en inglés) es una bomba de insulina desarrollada por la empresa norteamericana Insulet (enlace externo en inglés). La principal cualidad que caracteriza a Omnipod del resto de bombas de infusión continua de insulina es que carece de tubo. Por tanto, la propia bomba es la que administra la insulina directamente al cuerpo, al que va adherida mediante adhesivos como lo hacen los sensores de medición intersticial. Esta cualidad hace que Omnipod sea un dispositivo más pequeño que el resto de bombas de insulina tradicionales, ya que sólo contiene el reservorio de insulina y la mecánica implicada en la administración de insulina. El resto está en un mando de control llamado PDM (Personal Diabetes Manager), una especie de mando a distancia inalámbrico que envía todos los comandos a la bomba de insulina. Este sistema es valorado por muchas personas que por diversas razones no se sienten cómodos con las bombas tradicionales, ya sea porque les molesta el tubo… por su tamaño… etc. Actualmente, en España esta bomba de insulina no está financiada por nuestro Sistema Nacional de Salud, aunque la tienes disponible a través de la clínica privada Dialibre (enlace externo). Esta particular bomba de insulina tiene detrás un gran número de seguidores y defensores de su inclusión, entre los que me incluyo, ya que es un dispositivo muy diferente a los demás y por tanto, adecuado para cierta tipología de paciente que no puede utilizar una bomba tradicional por su estilo de vida o sus circunstancias personales y en cambio sí podría usar este tipo de bomba. Sin embargo, la tienes disponible a través de la cínica privada Dialibre (enlace externo en inglés).

Por ello, me pareció interesante aportar la experiencia de uso de alguien que la tenga y pueda darnos su visión sobre este dispositivo. Se trata de Susana Feans Ponte, una gallega con diabetes tipo 1 desde hace veinte años, experta en su diabetes, muy activa en los distintos grupos de Facebook sobre la enfermedad y una de las creadoras de la reciente web Republika Diabetes (enlace externo). Susana está siempre dispuesta a ayudar a otras personas en el manejo de dispositivos relacionados con la diabetes y perfecta conocedora de todas las tecnologías relacionadas con la gestión de la diabetes. Pionera en España en la interconexión entre la bomba de insulina y la medición continua con dispositivos wearables como smartphones o smartwatches a través del entorno NightScout, Susana es una firme defensora de las ventajas de la tecnología en la diabetes. Y aceptó mi propuesta de contar en este blog su experiencia con Omnipod, algo que me parece muy interesante para todas las personas que quieren saber más de esta interesante bomba de insulina. Ella va a ser la firma invitada en este post y desde aquí le agradezco que haya querido colaborar conmigo. Esta es su crónica…
MI EXPERIENCIA CON LA OMNIPOD
Mi nombre es Susana y llevo en terapia con bomba de insulina desde hace 2 años. He usado los modelos de Medtronic (Veo y 640g) desde que empecé con terapia ISCI y al poco de empezar con sistemas de infusión empecé con sistemas de monitorización continua, anteriormente había usado el Freestyle Libre. Continuamente había oído hablar sobre la bomba de insulina Omnipod y sus buenas opiniones. A mí nunca me convenció ni me pareció que aportara nada diferente a lo que usaba, no obstante, me decidí a probarla este verano. Después de 2 meses con ella, y si bien veo diferencias respecto a otras opciones muy significativas, debo reconocer que después de su uso me gusta esta opción. Pero, ¿es una bomba que le puede encajar en su terapia? Aquí les dejo mis impresiones, sus ventajas e inconvenientes desde mi experiencia de 2 meses con ella.
A continuación listaré las mayores diferencias de esta bomba de insulina. Al principio de cada punto el símbolo + indica una ventaja y el – una desventaja. Si lleva ambos es que puede implicar aspectos tanto positivos o negativos bajo determinadas circunstancias.
(-/+) La Omnipod consta de 2 partes diferenciadas una de ellas son los pods, lo que va pegado al cuerpo que viene a ser como una minibomba desechable cada 3 días que contiene hasta 200 unidades de insulina. Es totalmente independiente, sumergible. La otra parte es el controlador el PDM (Personal Diabetes Manager), desde él se dan todas las instrucciones a la bomba o pod. El pod funciona sin el PDM cerca únicamente para infusión basal, puesto que para introducir bolos o cualquier modificación en infusión basal es necesario que esté cerca el PDM (se comunican de manera inalámbrica). En este aspecto se parece a la bomba Roche cuyo controlador es independiente y además glucómetro (cosa que también incorpora el PDM) sin embargo en bombas Roche siempre está la posibilidad de manejo de bomba sin el mando/glucómetro. Con Omnipod esto no es posible. Si usted se olvida el PDM en casa ya no puede modificar ninguna basal, introducir basales temporales o bolos ni absolutamente nada en la bomba que lleva pegada. Al principio esto me causaba cierta preocupación y no deja de pasarme por la cabeza la posibilidad de perderlo o simplemente que corra al encuentro del suelo por algún motivo (un verdadero problema). Así puede encontrarse, como me ha pasado, estar en la ducha tan ricamente y que el eso que llevas pegado empiece a pitar y no tener ni idea de que está pasando hasta que encuentra el PDM (que no es sumergible), donde puede consultar la alarma correspondiente a que es debido (en mi caso a que el pod había llegado a su fin).

(+) La segunda mayor diferencia es que no lleva nada colgando, ni cables que parecen tener cierta atracción por pomos de puertas y a enganches, ni tampoco va a tener nada por la cama enrollándosele a la cintura. La sensación de que me dejo algo ha estado presente hasta el tercer pod (aproximadamente una semana). Comprobaba una y otra vez que lo llevaba todo, echaba de menos eso con lo que cargaba siempre.
(-) En verdad una libración a pesar de que es inevitable que se note debajo de la ropa los pods (me los he puesto en brazos y piernas para descansar zonas que con otras bombas uso más frecuentemente), por lo que en parte es una desventaja. Una vez fijado el pod estará ahí durante 3 días por lo que recomiendo que escojan bien el sitio, tanto si quieren que no se vea como si piensan que les resultará incómodo. Por otra parte, los he mantenido pegados sin ayuda adicional ni de adhesivos ni pegamentos 3 días intactos con playa, piscina y demás ajetreos diarios del verano…etc. Esto me ha sorprendido la verdad. Desde luego la característica de “sin cables” es la más apreciada por mayoría de usuarios y yo pensaba que era sobrevalorada, pero me he dado cuenta de que no lo es. Es maravilloso sentir que no te dejas nada que ya lo llevas todo pegado y que te puedes meter en playa o piscina sin pautas de desconexión o sin cargar con el cinturón la verdad. He notado además que desperdicio menos insulina al no tener que llenar el cable de bomba por lo que la cantidad que metes en la bomba es la cantidad que usarás.

(+) Otra gran ventaja de este sistema que lo diferencia de otros es la ausencia de necesidad de purgado. Posee un sistema automático de purgado que elimina burbujas, no obstante, yo he observado burbujas una vez retirado el pod pero no he tenido ninguna subida inexplicable por lo que me parece que esta característica funciona bien.
(-) Como gran diferencia muy significativa en mi opinión, especialmente para niños con gran sensibilidad a insulina es que el menor paso admitido por esta bomba es de 0.05 a diferencia de las demás bombas en mercado que son de 0.025. Esta característica las hace claramente inservibles para personas con sensibilidad altas a la insulina (normalmente niños muy pequeños) en mi opinión. La configuración en el recomendador donde se introducen ratios raciones-insulina tampoco admite fracciones tan pequeñas como bombas de insulina 640g o animas, por ejemplo. Además, el reservorio se llena como mínimo con 85unidades hasta 200ui que es capacidad máxima. Esto lo considero como negativo puesto que muchos niños usan cantidad muy pequeña de insulina diaria.

(-) Otra de las desventajas si has usado la 640g de Medtronic con parada predictiva es que Omnipod no vincula con ningún monitor continuo de glucosa. Yo he usado el Dexcom g4 al tiempo que usaba la Omnipod. ¿Es esto un drama? Pues no obviamente. No obstante, la compañía tiene entre sus proyectos el uso de CGM vinculado para hacer de la Omnipod un sistema híbrido de páncreas artificial. Sin embargo, es algo que echo de menos cada vez más al usar CGM de manera habitual.
Si bien estas son las mayores diferencias que he experimentado hay otras que, aunque menores, también destacan y son estas:
(+/-) Como parte del PDM hay un recomendador de bolos y una base de datos de alimentos para facilitar el conteo de raciones de hidratos de carbono. Sin embargo, no lo he encontrado útil ya que previo al uso del recomendador es necesario hacer un patrón de comida si quieres usar dicha base de datos. En mi opinión no es muy práctico. Solo he incluido una comida tipo de desayuno porque no suelo variar esta comida, para el resto directamente he metido las raciones manualmente. No obstante, esta característica de la Omnipod ayuda y mucho al conteo de hidratos enormemente. Si no estás seguro accedes a la base de datos (muy amplia por otra parte) y listo. Yo uso de manera frecuente otras apps para esto y no lo he usado con regularidad.
(-) La velocidad de bolus no es personalizable. Solo dispone de una velocidad a diferencia de otras bombas donde existe la posibilidad de rápido, normal o lento. En la Omnipod solo hay velocidad que es la de “tortuga reumática”, es decir no lento, sino hiper mega lento y en esto sí he notado los picos que me causa también debido a mi costumbre a introducir bolos nada más empezar a comer. Pero he notado que hago más pico debido a esto.
(-) Las marcas que dejan los pods en mi caso, han sido muy significativas. Cosa que no me había pasado de manera tan destacable con los catéteres de bombas Medtronic. Anexo foto para que juzguen. Un pod que cambie hace 3 días me ha dejado una marca que persiste 3 días después de manera muy obvia, demasiado en mi opinión.

(-/+) El pod emite un ruido por cada paso de infusión que hace y con los bolos igual. Esto no es supermolesto porque además de que puedes comprobar que está funcionando, pero sí algo inoportuno a veces. No es un ruido exagerado más bien como un click click click…pero al cabo del tiempo he pensado que mejor sería que no lo tuviera. En caso de Medtronic son inaudibles los pasos de insulina sin embargo me han comentado que Roche sí se oye. En cualquier caso aunque no es un drama me ha llamado la atención.


(+) Algo destacable en esta bomba es que la descarga de datos además de realizarse con software proporcionado por la empresa fabricante, es posible de manera online a través de varias plataformas como Diasend, Diabbass y SiDiary. Esto son los que recomienda la empresa, pero yo he descargado en otras aplicaciones como Tidepool con igual eficacia. Esto lo considero un gran punto positivo al contrario que Medtronic que solo permite descargas a su ya conocido Carelink Personal y no sin esfuerzo previo digno de peli de hackers.

(-) La mayor desventaja sin duda es que en España esta opción no está recogida por sanidad pública. No hay servicio técnico a quien acudir. Sin embargo, esperamos que esto cambie con la finalización del contrato de distribución exclusiva que tenía Insulet con Ypsomed para Europa. A partir de ahora será la propia Insulet quien distribuya sus productos en todo el mundo.

Estas son las diferencias que he experimentado en cuanto a similitudes esta bomba es de fácil uso y configuración. La colocación del pod y cambio es muy ágil (en 3 pasos), fácil (en menos de 4 clicks) y asistida por PDM como otras bombas, admite diferentes programas basales (hasta 7 programas), diferentes tramos para ratios, objetivos y sensibilidades (hasta 8 segmentos), y dispone de diferentes tipos de bolos al igual que las demás bombas, lleva glucómetro integrado con PDM aunque también se puede acceder al recomendador sin su uso introduciendo glucemias manuales (al contrario que Roche que es necesario glucemia capilar para acceder al recomendador).


Para finalizar, en estos dos vídeos a continuación puedes ver el cambio de pod y el interface y los menús del PDM de la bomba:
Muchas gracias a Susana Feans Ponte por su detallado análisis de Omnipod y el abundante material que me ha suministrado para hacer este artículo. Esperemos que este tipo de bombas-parche lleguen pronto tanto a España como a otros países en los que actualmente sólo disponen de las bombas tradicionales.