La carrera contra sí mismo de Dexcom

Las continuas novedades de Dexcom

Reconozco que lo de Dexcom me sorprende. Cuando aún tiene reciente el lanzamiento del medidor continuo G5 en algunos países, la empresa norteamericana sigue con velocidad de crucero sus desarrollos y ya tenemos bastantes detalles sobre su siguiente generación; el Dexcom G6, que será lanzado previsiblemente en 2018 en Estados Unidos. Un sistema que aumenta la duración del sensor hasta los diez días y que se prevé que requiera una única calibración diaria. Pero la prueba de que el sistema es mucho más eficaz es el hecho de que su exactitud mejora con y sin calibración. Si en el actual G5 ya está por debajo del 10%, desde Dexcom afirman que en sus ensayos el nuevo G6 ha arrojado un 8,1% MARD (con 1 calibración diaria) y un 8,8% sin ninguna calibración. Por tanto, hablamos de más duración del sensor y más exactitud, los grandes objetivos que deben ir consiguiendo los medidores continuos de glucosa del mercado. A priori, el nuevo Dexcom G6 va a ser el sistema a batir, al menos en cuestión de exactitud. Aunque ya sabemos que la exactitud no lo es todo. Operabilidad, interface, transmisor, aspectos relativos a la colocación del sensor, calibraciones, coste… hay distintos factores que hacen que un sistema pueda verse penalizado, ya que no debemos olvidar que hablamos de un aparato que se usa las 24 horas del día los 365 días del año.

[Tweet «Actualmente el #DexcomG5 es el sistema a batir en exactitud»]
Imagen del medidor continuo Dexcom G5
Actualmente Dexcom es el sistema más abierto del mercado (imagen: Dexcom).

G5, el sistema a batir

El Dexcom G5 es la última evolución de su sistema de medición continua. Sin duda, del G5 yo destacaría dos cosas. Una buena y otra no tanto: su exactitud y la corta vida del transmisor, respectivamente. En cuanto a la exactitud, ha permitido que no sea necesario hacer medición capilar para tomar decisiones terapéuticas. Ojo, es el único aparato disponible a día de hoy que lo permite. Me aburro de decir en foros y redes sociales que NO PODEMOS TOMAR DECISIONES DE INSULINA BASÁNDONOS EN MEDICIONES DE NINGÚN OTRO SISTEMA DE MEDICIÓN CONTINUA O FLASH. No me cansaré de repetirlo. Pero el G5 dispone de esa aprobación derivada de su exactitud, lo cual lo convierte en un sistema evidentemente práctico, al necesitar el medidor capilar tan sólo para calibrar el equipo. Y en cuanto a su sombra, es evidentemente el transmisor. El gran inconveniente del G5 ha provocado un enfado generalizado entre muchos de sus usuarios: la vida útil del transmisor es de tan sólo 3 meses. Concretamente unos 112-114 días, tras los cuales hay que adquirir otro nuevo. Sí, lo sé. Suena increíble y es sencillamente incomprensible. Pero así lo ha hecho la gente de Dexcom y sin duda es algo que encarece más el sistema. Probablemente su foco empresarial en el mercado norteamericano (donde está cubierto por seguros médicos) haya hecho que el aspecto económico les preocupe menos, lo cual no pasa en países como España, donde el usuario tiene que pagarse de su bolsillo el coste de todo el sistema.

La evolución fulgurante

Algunas veces nos quejamos de la rápida evolución tecnológica al comprar dispositivos de consumo, hasta el punto de que el portfolio de la marca cambia cada pocos tiempo y un último modelo es descatalogado casi en cuestión de meses. Y este mismo fenómeno empieza a darse en productos como la medición continua o las bombas de insulina. Aunque a priori nos resulte frustrante, no es más que un indicativo (beneficioso en el fondo) de que la evolución es rápida y continua, y todos nos beneficiamos de ello. Y Dexcom es la que a ojos del gran público más rápido parece estar evolucionando sus aparatos, hasta el punto de que a veces algunos clientes se sienten frustrados al comprar un medidor que se ve superado en cuestión de pocos meses. Sea como fuere, la lógica fugacidad de la novedad tecnológica es algo ya conocido por el mercado de consumo, que como he dicho en más de una ocasión no nos debería sorprender que empiece a suceder ya en dispositivos médicos como estos.

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insertador del próximo Dexcom G6
EL nuevo insertador busca la comodidad y la simplicidad, al estilo de otros sistemas de la competencia (imagen: DiabetesDaily).

Mientras tanto, en Dexcom continúan con sus planes a corto plazo, que además de los ya descritos, incluyen otros como un nuevo insertador para el sensor, al estilo de los utilizados en la competencia (este era sin duda uno de los puntos muy mejorables en el sistema Dexcom), o un nuevo transmisor más reducido en tamaño. Y aunque cada vez se use menos, también están desarrollando un nuevo receptor, esta vez con pantalla táctil. ¿Lo último? la integración total con el reloj de Apple; Apple Watch, presentado en el último Keynote de Apple (enlace externo en inglés). Esta noticia, si bien pasó desapercibida para la mayoría, no para las personas con diabetes. Dexcom sigue en su proceso de integración y desde ahora se comunica directamente con Apple Watch. O sea, que ya no necesita el iPhone para recibir los datos y que sea este quien los envíe al reloj de la manzana. Es una interesante evolución (para los afortunados poseedores de este ecosistema de Apple). Es cierto que no muchos tienen tanto un iPhone como un Apple Watch, pero que exista esta posibilidad es muy interesante y da un plus de autonomía y calidad de vida adicional al hecho de tener que mirar las glucemias en el teléfono. Primero fue prescindir del receptor Dexcom, y ahora se prescinde incluso del teléfono. ¿Qué ventaja tiene esto? pensarán algunos. Pensemos por ejemplo en situaciones en las que el móvil no lo tenemos con nosotros: mientras hacemos deporte… o en un vuelo, donde debemos estar con el teléfono en modo avión sin comunicaciones inalámbricas. Otra posible ventaja es que por ejemplo, alguien puede querer comprarse un Apple Watch y no quiere un iPhone. Ahora las comunicaciones son más rápidas y eficientes, al no tener que pasar primero por el smartphone.

Integración Dexcom con Apple Watch
Presentación de las nuevas funcionalidades Dexcom en Apple Watch (imagen (9to5mac.com)

Otra de sus mejoras es sin duda la esperadísima compatibilidad del sistema G5 con Android. Aunque lleva algo más de tiempo en Europa, la aprobación en EEUU es muy reciente, y con ello el Dexcom G5 se asegura (sobre el papel) la compatibilidad en ambos entornos; los más extendidos del planeta. Y digo sobre el papel porque en Android la lista de modelos soportados es ciertamente pequeña y prácticamente se circunscribe a los más conocidos de la marca coreana Samsung, a los teléfonos Nexus de Google y a los más populares de LG. No intentes instalarla en otros aparatos; te dirá que no es compatible. Yo mismo lo intenté hace unos días, ya que este verano voy a probar el sistema Dexcom G5 por gentileza de su distribuidor en España Novalab Ibérica. Pero me fue imposible. Por tanto, la compatibilidad Android queda limitada a algunos dispositivos de Samsung, LG, Motorola y algunos smartwatches con sistema Android Wear. Puedes ver la lista completa aquí (enlace externo en inglés).

¿Qué CGM me compro?

Esta es quizá una de las preguntas más frecuentes que me hacen muchos lectores. Y mi respuesta siempre comienza de la misma manera: «¿qué necesitas tú?». Todos me preguntan «¿cuál es el mejor medidor continuo?», pero cada persona es diferente y su diabetes también. Cada situación exige una necesidad concreta. Quien sufre de hiperglucemias nocturnas, tiene un trabajo absorbente que no le permite vigilar demasiado su diabetes, quien tiene hipoglucemias inadvertidas, quien está con planes de quedarse embarazada (o ya lo está), quien tiene miedo excesivo a la hipo o a la hiper… hay distintos perfiles que hacen necesario adquirir un sistema con alertas como Dexcom o Medtronic o uno como el sistema Flash de Abbott. La exactitud es algo que siempre reclamáis, pero en realidad todos funcionan aceptablemente bien y en la práctica no hay tantas diferencias. En realidad, hay otras circunstancias más importantes que definen mejor qué equipo necesitas. Haz una tabla comparativa con sus cualidades y otra con las características que tú más valoras en un medidor de este tipo. Eso te ayudará. Pero no tardes mucho en tomar la decisión, porque es probable que ya haya salido al mercado otro modelo ;-). Esto viene a ser como comprarse un smartphone. Si tardas mucho en elegir, ya ha salido el último modelo que supera al anterior e incorpora importantes mejoras. La elección debe ser rápida y decidida. Si no, siempre estarás esperando al siguiente…

[Tweet «#Dexcom y el sensor de glucosa + pequeño del mundo»]

El CGM más pequeño del mundo

Y prueba de que la evolución de Dexcom es continua es por ejemplo esta prometedora alianza con Verily -del grupo Alphabet, léase Google- que dice haber conseguido crear un sistema de medición continua extremadamente pequeño (y según sus creadores) «menos caro». Con un grosor aproximado de una pastilla de chocolate tipo M&M y el diámetro de un penique, este desarrollo (que aún no tiene ni nombre oficial y que está sin terminar) se prevé que podría revolucionar el mercado de medidores continuos de glucosa. Al igual que el G6, el sensor Verily-Dexcom funcionaría sin calibración y permitiría tomar decisiones terapéuticas sin necesidad de medición capilar. Hablamos por tanto de un aparato que al igual que el Dexcom G6, podría desterrar por completo la medición capilar. Desde Dexcom ya han afirmado que una primera generación de este sistema (que ya sería más pequeño que el sensor del FreeStyle Libre) podría estar disponible a finales de 2018, mientras que una segunda versión aún más pequeña vería la luz a comienzos de 2020. Sin embargo, desde Verily (enlace externo en inglés) afirman que inicialmente este desarrollo será exclusivamente (e inexplicablemente) para diabetes tipo 2. En cualquier caso, todo se ve aún en este proyecto demasiado optimista y con un primigenio nivel de desarrollo.

medidor continuo de glucosa Verily
El nuevo y prometedor medidor continuo Verily parece ser realmente pequeño (imagen: DiaTribe).

Dexcom va rápido en sus evoluciones, pero también el resto de empresas que desarrollan estos equipos, aunque no tengan la frecuencia de lanzamientos comerciales que tiene la empresa californiana. En cualquier caso lo que está claro es que estos próximos 3 años vamos a conocer importantes avances tecnológicos en el diagnóstico y tratamiento de la diabetes. Son motivadores e ilusionantes, aunque también generan la típica frustración por ser aún (al menos en países como España) tecnologías al alcance de pocos bolsillos. Pero todo esto cambiará en los próximos años. Vivimos un momento del paso de la medición capilar a la intersticial y continua. Y después pasaremos de la invasiva a la no invasiva. El progreso es imparable, aunque a todos nos gustaría que fuera no sólo imparable, sino más rápido… y sobre todo mucho más accesible, ¿verdad?

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Fuente: DiaTribe / Diabetes Daily / Diabetes Community / DiabetesMine (enlaces externos en inglés)